domingo, 18 de enero de 2015

¿Debe preocuparnos la deflación española?

No debe. Hay que diferenciar las razones por las que los precios caen. Lo importante es analizar la variación de los precios y el crecimiento o si se quiere la variación del paro y hay cuatro escenarios posibles:
a) Suben los precios, la economía crece y el paro baja: Este primer escenario es fruto de una manera de crecer impulsada por la Demanda Agregada, por lo general debida a políticas de estímulo de carácter fiscal y monetario, aunque también puede venir motivada por una devaluación de la moneda o unas expectativas muy favorables en el Consumo de las familias o en la Inversión de las empresas.
b) Suben los precios y la economía entra en recesión aumentando el paro: Este segundo escenario es el conocido como estanflación, suele ser el resultado de unas expectativas de inflación alcistas impulsadas por políticas monetarias muy expansivas y subidas permanentes de salarios y de costes para adecuarse a la inflación.
c) Bajan los precios y la economía entra en recesión aumentando el paro: Esta situación es quizás la que se está produciendo en algunos países europeos. La Demanda Agregada disminuye por un empeoramiento de expectativas en el Consumo y la Inversión, o bien por llevar a cabo políticas fiscales austeras o por políticas monetarias rectrictivas. También puede ser el resultado, en países muy exportadores, de caída del crecimiento de los socios comerciales. Es una situación que requiere políticas de estímulo en la Demanda.
d) Bajan los precios, la economía crece y el paro desciende: Esta es la situación de la economía española. Es la Oferta Agregada el origen de este crecimiento y es debida a que los salarios descienden, a que el precio de las materias primas baja o a incrementos de productividad, entre otras variables. Es una manera de crecer que va a acompañada de incrementos de competitividad y por tanto hay que mantenerla hasta que nos acerquemos al pleno empleo, momento en el cual los salarios empezarán a subir.

En el caso de la economía española, como la tasa de paro es muy elevada, este proceso será aún lento. Se puede ayudar impulsando la Demanda con políticas expansivas fiscal o monetaria o también con una depreciación de la moneda, como está ocurriendo con el €. Por tanto las perspectivas son buenas, no se nos está exigiendo un ajuste fiscal severo, el BCE va a seguir inyectando liquidez y el € está depreciándose. En cuanto a la Oferta Agregada, los precios del petróleo siguen cayendo y debemos seguir con salarios moderados hasta que recuperemos unas tasas de paro más moderadas, en torno al 15% que puede ser ahora nuestra Tasa Natural de Paro. Si a esta situación pudiéramos añadir una mejora de la productividad con una utilización más intensa de las tecnolgías de la información aplicadas a la organziación empresarial y una formación en estas tecnologías de los trabajadores, entraríamos en una senda de crecimiento sólida y estable.