domingo, 27 de noviembre de 2011

El silencio de Rajoy.

Se ha comentado mucho esta semana el silencio de Rajoy después de su victoria electoral el pasado 20N. Quizás esperábamos el anuncio de un conjunto de medidas suficientemente contundentes para relajar la tensión de los mercados financieros y que hiciera descender la prima de riesgo país. Sin embargo nada más lejos de lo que ha ocurrido. Su mutismo ha sido total. Ha empezado el traspaso de poderes y lo más que ha hecho es hablar con los banqueros no indultados para escuchar sus opiniones y empezar a idear la creación de un "banco malo". ¿Ha hecho bien? Como siempre depende de lo que piense hacer de verdad. Si va a acometer reformas profundas en el mercado laboral y en la negociación colectiva y fuertes recortes en el Gasto Público, ha hecho bien. Los mercados descuentan muy rápidamente las señales y además están cansados de las señales de ZP que, al final, se quedaban en nada: quieren hechos. Además, si anuncia estas medidas, antes de tomar posesión ya tiene la primera huelga general convocada y puede que con esa presión no llegue nunca a tomar estas medidas que son necesarias. Esperará unas semanas, tendrá una sesión de investidura un tanto ambigua y formará Gobierno (González Páramo sería un Ministro de Economía con un buen perfil frente a los mercados financieros, aunque parece que al final será nombrado Montoro, ya se verá). Junto a estas medidas, promoverá los incentivos fiscales y de reducción de las cargas sociales a la creación de empleo y puede que pongan en marcha el "banco malo", para que el sistema financiero español se sanee de una vez y el crédito empiece a fluir. Desde la perspectiva de la Demanda Agregada, intenta con ello que la Inversión y el consumo empiece a tomar impulso. Debería, además, incentivar a las empresas exportadoras y tener una acción decidida desde el lado de la Oferta Agregada, con un Plan de mejora de la Productividad empresarial (fomentando el uso de las tecnologías y la formación en las empresas) e insistir en la competencia de nuestros mercados para que los márgenes empresariales no suban, pero no parece que vaya a hacer nada al respecto.  Y, claro, esperemos que finalmente haga esto y no entremos en un proceso de intentos de consensos y pactos que ya se han perseguido con escasos resultados y que además son imposibles. (27:nov:2011)

No hay comentarios:

Publicar un comentario